





Cuando esté en Tianjin, no deje de probar el jianbing guozi, un sabroso panecillo relleno de crujientes palitos de masa frita. Se extiende una masa fresca de judías mungo sobre una plancha. Luego, se casca un huevo encima y se añaden crujientes palitos de masa frita. La tortita se cubre con una mezcla especial de pasta de soja y tofu fermentado. Todo se elabora por encargo en bulliciosos puestos callejeros, y cada bocado refleja el sabor y el encanto locales de la ciudad.