Situadas tranquilamente en el oasis al norte de la cuenca de Turpan, en la Región Autónoma Uygur de Xinjiang, en el noroeste de China, las Ruinas de Jiaohe alguna vez sirvieron como un importante centro de transporte a lo largo de la antigua Ruta de la Seda, siendo testigo de la larga historia de la civilización china.
Las ruinas de Jiaohe son las reliquias de una ciudad construida con arcilla mejor conservadas, más duraderas y más grandes del mundo. Durante años, el país se ha esforzado en reforzar y preservar las ruinas de Jiaohe, al mismo tiempo que las ha integrado con el turismo cultural para compartir el encanto de esta maravilla histórica con un público más amplio.
Debido a su vital valor histórico, las ruinas de Jiaohe fueron designadas en 1961 como una de las primeras unidades de protección de reliquias culturales clave a nivel nacional. En junio de 2014, las Rutas de la Seda: la Red de Rutas del Corredor Chang’an-Tianshan, un esfuerzo conjunto de China, Kazajstán y Kirguistán, fue inscrita en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO.
(Todas las imágenes vía VCG)
